IOTA es una privilegiada isla tecnológica con un ecosistema virgen rodeado de dinero por todas partes. Más allá de los estragos causados a la economía mundial por la pandemia de coronavirus el mercado SmartHome crecerá 4%.
Las ciudades inteligentes son una complejidad aún mayor, pero las SmartHome son estructuras que lo modelan. Decir que la industria de la Internet de las Cosas tiene la salud de un roble no es exagerar. Aun en plena expansión e impactada por una pandemia eleva su valor.
En la Fundación IOTA nadie ha bajado el ritmo. La pandemia es una circunstancia que estimula la creatividad debido a que conocemos nuestras fortalezas. El mundo tocado por la IOTA como estándar de la IoT ofrecerá respuesta a la sociedad y la mantendrá segura.
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En la práctica la IoT mantiene a ritmo vital el mundo de la IOTA. Aunque manido, es un dato importante decir que se estima que para finales de 2020 habrá más de 31.000 millones de dispositivos conectados en el mundo. La cifra subirá a 75 mil millones para 2025. A su vez se proyecta que las inversiones en este campo alcanzarán, para 2021, los $2.100 millones.
Mercado SmartHome
La misma brisa que favoreció a la digitalización y al comercio online, tocó al mercado de las SmartHome. El impacto no fue en la misma medida, pero fue suficiente para mantener rozagantes los mofletes de la industria.
De acuerdo a ABI Research el panorama para el mercado SmartHome es promisorio. ABI Research ayuda a las organizaciones y a sus visionarios a conquistar con éxito la transformación digital. Desde 1990 ABI Research se ha asociado con cientos de marcas de tecnología líderes, compañías de vanguardia, agencias gubernamentales con visión de futuro y grupos comerciales innovadores en todo el mundo.
A través de sus investigaciones de vanguardia y equipo mundial de analistas, ofrecen una visión práctica y una orientación estratégica sobre las tecnologías de transformación que están transformando las industrias, las economías y las fuerzas de trabajo en la actualidad.
Hallazgos de la consultora
En un reciente trabajo de investigación la consultora se topó con estos hallazgos en el mercado SmartHome. De acuerdo a ABI Research para 2020 los ingresos por hogares conectados alcanzarán $85 mil millones. El monto representa un 4% de crecimiento. Aunque sus expectativas eran otras, la fracción es un indicador de la salud del sector y el prometedor futuro.
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La pandemia ha hecho pensar no solo a las personas, sino a los gobiernos, en la necesidad de conducir los destinos de la sociedad hacia las ciudades inteligentes. Antes de la pandemia, la misma consultora pronosticaba un aumento del 21 anual durante este año. Lo registrado infiere que la COVID-19 produjo un recorte de $14.000 millones.
IOTA, junto a los proyectos de ciudades inteligentes en los que trabaja. Están tomando las variables que han aflorado en la pandemia para incorporar innovaciones. El mercado SmartHome debe incrementar sus niveles de relación electrónica con la gobernanza. Además debe establecer conexiones más humanas en términos de E-Salud. La movilidad, la bioseguridad, la identidad y los pasaportes sanitarios deben transformarse en un estándar también.
Una consultora optimista
Finalmente decir que todo esto es temporal no es una pérdida de tiempo. Mientras que el impacto inmediato es negativo, los cambios estructurales iniciados en 2020 tendrán un impacto positivo en el futuro. Esta experiencia mundial permitirá impulsar la adopción de muchas áreas del mercado SmartHome.
Según la corporativa para 2026, el mercado de hogares inteligentes alcanzará $317 mil millones. Se ubicará hasta un 5% por encima de las proyecciones anteriores a la COVID-19. ABI Research plantea que los ingresos perdidos en 2020 se diferirán para los próximos años. Especialmente en todo lo relacionado a los hogares inteligentes.
El abastecimiento perdido en 2020 puede impactar en el atractivo y la longevidad de algunos equipos. Un ejemplo se puede ubicar en los tradicionales sensores de contacto y movimiento. Sin embargo la innovación será más agresiva en el mercado SmartHome. Las soluciones serán adoptadas bajo el formato de monitoreo en video o Wi-Fi Motion.
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“Nuevos proveedores de Smart home usarán nuevas formas de ofrecer funcionalidad y a menor precio, con menos dispositivos”, señala la compañía como visión al futuro. “La COVID-19 pudo haber impactado en los ingresos de los hogares conectados para este año, pero a largo plazo ayudará a impulsar las inversiones, su adopción, y hacer disruptiva la integración de tecnología”, mencionaba un analista de la consultora.
